La Confederación de Empresarios de Galicia (CEG) y el Instituto Galego de Promoción Económica (IGAPE) presentaron esta mañana en la sede de la organización empresarial gallega un Centro de Seguimiento de Licitaciones Internacionales, fruto del convenio firmado entre ambas para su creación el pasado 26 de abril y enmarcado en la estrategia para la internacionalización de las empresas gallegas 2021-2025.
El proyecto presentado ha permitido el desarrollo y gestión del portal virtual “SALT” (al que se puede acceder a través de la página web de la ceg www.ceg.es o directamente a través de https://salt.ceg.es), que facilita al empresariado gallego el acceso a información cualitativa sobre la apertura de concursos públicos de carácter internacional y que incluye un servicio de búsqueda de licitaciones de organismos multilaterales; un resumen del proceso de licitación y enlace al portal de publicación; un servicio de solicitud de alertas personalizadas y de asesoramiento especializado; información sobre el compliance como factor de competitividad y posicionamiento del tejido productivo gallego en los procesos de internacionalización; e información sobre los servicios especializados del IGAPE.
Además, el centro incluye un servicio de información y asesoramiento sobre al acceso y participación en licitaciones internacionales, en el cual un equipo técnico realizará una evaluación previa de la capacidad licitadora de cada una de las empresas que quieran recibir el servicio y a partir de la cual se diseñará una estrategia de apoyo individualizado que ayude a las compañías a evolucionar desde la etapa más básica hasta el momento de participar en una licitación y concurrir con posibilidades de éxito.
Igualmente, desde el mismo se llevarán a cabo acciones de información y difusión sobre licitaciones internacionales como vía de internacionalización de la empresa gallega.
Este servicio ya había sido promovido en el pasado por la Xunta de Galicia en colaboración con la organización empresarial gallega con un alto grado de éxito, que les permitió a las compañías gallegas acceder a contratos internacionales de especial relevancia superando los 100 millones de euros.