La Confederación de Empresarios de Galicia (CEG) rechaza el estado de alarma hasta el próximo mes de mayo, ya que amenaza la confianza de los ciudadanos y de los propios empresarios en una recuperación económica; solicitando -por este motivo-, que se despliegue en plazos más cortos con control parlamentario.
Además, solicita la puesta en marcha cuanto antes de un plan urgente de medidas económicas para salvar empleos, empresas y autónomos que incluya entre otras herramientas: moratorias y aplazamientos de impuestos y de pagos de determinados suministros; extensión de los ERTEs más allá del próximo 31 de enero; ampliación de líneas de liquidez ICO; deducciones fiscales; ayudas directas a los sectores más afectados, etc.
De todas formas, la CEG advierte de que habrá que tomar medidas económicas más allá de las coyunturales para solucionar la situación a la que nos enfrentamos ante la segunda ola de la pandemia. Se trata de reformas de calado que llevan tiempo pendientes de ser llevadas a cabo y que con la crisis actual se han dejado de lado y se hacen más necesarias que nunca.
Estatuto electrointensivo
En otro orden de cosas, la patronal gallega insiste en la necesidad imperiosa de aprobar –de una vez por todas-, el Estatuto del consumidor electrointensivo, atendiendo a las alegaciones presentadas por Galicia, Asturias y Cantabria, lo que permitirá que empresas industriales con un mayor consumo de electricidad sigan siendo rentables.